Parque de las Ciencias de Granada
El Parque de las Ciencias se articula en unas serie de cajas independientes realizadas con muros de hormigón, que definen las diferentes áreas del museo. En cada una de esas cajas se disponen diferentes alturas con forjados de hormigón pretensado, según el uso.
El mayor reto ha sido encontrar la forma de conformar una cubierta común a todas esas cajas y sus comunicaciones convenientemente aislada sísmicamente y que resolviera con un sistema adecuado de juntas de dilatación la cubrición completa del edificio.
Sobre esta estructura metálica se dispone un cerramiento ligero de GRC que le confiere este aspecto tan especial de espacio topográfico.
Este aspecto se complementa con algunos lucernarios que permiten distribuir la luz natural por las zonas de comunicación del edificio.